Villalba del Alcor celebra sus fiestas grandes

Manuel Jesús Garrido Ponce y Mercedes Díaz Benítez- Villalba del Alcor

Villalba del Alcor celebra las fiestas en honor a Santa Águeda, que es patrona y madre de los villalberos, que sube de su Ermita al pueblo para reunirse durante 29 días con sus hijos. El pasado domingo 17 de Enero la Santa fue trasladada desde su Ermita a la Iglesia Parroquial de Villalba del Alcor, acompañada por la banda municipal de la localidad. El día 27 a las 7:00 de la tarde comienza la novena en honor a nuestra patrona. El día 4 de Febrero, al término de la novena, la Santa queda expuesta en besamanos, donde los devotos de nuestra Titular se ponen ante ella. El día 5 de Febrero (festividad de nuestra patrona) a las 8 de la mañana, alegres dianas a cargo de las bandas de la localidad. A las 12:00 de la mañana, Solemne Función Principal en su honor. A las 5:30 de la tarde, procesión de Santa Águeda por las calles del pueblo. A la entrada de la Santa se dispararan fuegos artificiales y el tradicional toro de fuego. El domingo 14 de Febrero se celebra una misa a las 10:00 de la mañana, trasladándose después a la Santa para su Ermita. En el pórtico de la Ermita delante de nuestra patrona se cambia la vara del hermano mayor. Este traslado es denominado con el nombre de “La fiesta del Tostón”, porque todos los villalberos nos quedamos en los llanos de Santa Águeda comiendo, bebiendo, cantando y bailando: se puede decir que los villalberos celebran un día de convivencia entre ellos. Estos días son grandes porque se celebran cultos y festejos a la patrona de la Villa de Villalba del Alcor. Esta fiesta se hace desde hace muchos años. Este es el himno que los villalberos le cantamos a nuestra patrona Santa Águeda:

Una joven por amor, a Dios se quiso entregar, desde su más tierna edad, hizo un voto al Señor.

Virgen permanecer, ser esposa del Señor y consagrarse a Él, por toda la eternidad (bis).

Era tan bella que Quinciano la prendió, un cruel gobernador que en la Sicilia vivió.

Pero su corazón de otro dueño quiso ser, de Jesucristo el Señor, el esposo siempre fiel (bis).

Para hacerla desistir de su virtud y su fe, una malvada mujer trató de hacerla caer.

Pero permaneció siempre firme, siempre fiel, porque amaba al Señor, porque era solo de Él (bis).

Y fue entregada a tormentos y le cortaron sus pechos, y en una oscura prisión fue arrojada al momento.

Y una luz celestial desterró su oscuridad, y apareciendo San Pedro la curó y le dio aliento (bis).

Y volvió a ser maltratada y volvió a ser torturada, y poco antes de morir a Dios así le rezaba.

Jesucristo Salvador, escucha mi oración, dígnate recibir mi alma en tu bondad (bis).

Santa Águeda de Catania este pueblo de Villalba, te tiene por su patrona, también por su protectora.

Cuida de nuestra salud, que haya trabajo y paz, que sepamos perdonar y vivir en unidad (bis).